Me acuerdo que en los 90 hubos unas zapatillas que revolucionaron el mundo del baloncesto a nivel del consumidor: las Reebok The Pump. Ya podías medir 1'60 que el solo hecho de hinchar tu lengüeta te daba derecho moral a creerte el mejor pivot de tu colegio (que en mi caso eran los Maristes Immaculada de Laporta, Solozábal o Minguella).

Veinte años después, y viendo la semifinal de la Supercopa entre Madrid y Barcelona, he pensado en otras bambas que podrían ponerse de moda en el mundo del baloncesto: las Diesel Sneakers. No sirven para correr más, ni para saltar más, ni siquiera para tocar el aro cuando lanzas de tres sin embargo su lema deja claro que a más de uno ahí arriba le irían de puta madre: "Diesel Sneackers, las zpatillas fantásticas para dar una patada en el culo". Aquí un anuncio, aquí otro y aquí otro de la llamativa campaña.

Off topic: Dios es justo. Primero envío a unos islandeses para vengarse del Stjarnan y ahora ha creado a un doctor para que cuelgue en su web las fotos de Larissa Riquelme antes de operarse. Aquí se pueden ver.

Escrito por por Anónimo el 25 septiembre 2010.
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