El making off del último anuncio de Ronaldinho
1. Llevo un día raro. Hoy me he acordado de Loko (jugador de Angola) y de la palabra "trola". Debe ser que se acerca el frío.
2. He visto el largo making off del último anuncio de Ronaldinho (sí, el de Esperá lo inesperado). ¡Qué coñazo es ser futbolista! ¡Qué coñazo es ser el hombre cuya profesión es decir "¡¡y ahora todos vamos a darle un fuerte aplauso a Ronaldinho para darle las gracias!! [minuto 7 del vídeo]"
3. También he visto este saque de Andy Roddick. Esto ha de ser un anuncio por cojones. Como el de Lebron James y sus canastas imposibles. Como el de los largueros de Ronaldinho. Tiene pinta de factoría Nike.
2. He visto el largo making off del último anuncio de Ronaldinho (sí, el de Esperá lo inesperado). ¡Qué coñazo es ser futbolista! ¡Qué coñazo es ser el hombre cuya profesión es decir "¡¡y ahora todos vamos a darle un fuerte aplauso a Ronaldinho para darle las gracias!! [minuto 7 del vídeo]"
3. También he visto este saque de Andy Roddick. Esto ha de ser un anuncio por cojones. Como el de Lebron James y sus canastas imposibles. Como el de los largueros de Ronaldinho. Tiene pinta de factoría Nike.
Cuando adolescente uno de mis sueños era el de decir por parlantes ante un estadio abarrotado pero en el más decoroso recogimiento "ha concluido el minuto de silencio". Mi adolescencia transcurrió sin Ronaldinho (y sobrevivî). Ahora, si volviese a ser adolescente (pero sin el acné y las urgencias hormonales de esa edad) mi sueño sería decir "¡¡y ahora todos vamos a darle un fuerte aplauso a Ronaldinho para darle las gracias!!" Un sueño más modesto y que puedo cumplir ahora mismo es darte las gracias por haberme abierto los ojos y mostrado el camino. ¡Qué grande eres, Manolo! Definitivamente el mejor cantinero de la blogosfera.
Lo de Roddick tiene huevos...aunque Ovejero rompió el larguero de un trallazo en la Romareda hace unos años...
Era un día que se jugaba un amistoso Zaragoza - Santos, con Pelé, el Pelé negro, y con el Pelé blanco, Arrúa.
Lo contaré algún día...
(Uno siempre arrima el ascua a su larguero, perdón, a su sardina)
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