Desgraciadamente para mí el disfraz de Eto'o fue todo un éxito. El problema es que creo que pecó de realismo. Me pasé toda la noche paseando por la discoteca preguntando a caperucitas, vampiras y demás pseudo disfrazadas de la fiesta a ver si alguna gozaba de estar en mi grupo. La pura/puta verdad es que a las cuatro y media de la madrugada, y estando más solo que la una, acabé abandonando el Carnaval maldiciendo al tipo que inventó la careta y cagándome en el cabrón que triunfaba en el otro grupo.

En fin, seguiré con la "autogestión" del soltero.

Escrito por por Anónimo el 18 febrero 2007.
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