Me imagino el día que la brasileña Lia Mara Lourenço descubrió su vocación de árbitro. Seguramente pensó: "Muy bien, Lia, has encontrado tu vocación pero te has equivocado de país. Aquí ser árbitro de fútbol significa que el día menos esperado Edmundo te pegue un puñetazo o los aficionados te escupan, te lanzen piedras y con suerte sólo te abran la cabeza. No, Lia, aquí no podemos hacerlo".

Me imagino también el día que la chica encontró la solución a su problema. "No te preocupes, Lia, hazte juez de pruebas atléticas. Evitarás la violencia y podrás ejercer tu vocación".

Lo que no me imagino es lo que debío pensar la pobre Lía cuando ayer levanto su cabeza del suelo y vió que un tipo estaba serrando una jabalina clavada en su pie izquierdo. "Me cagó en la puta - debió decir- sólo hay un mísero lanzador de jabalinas en todo Brasil y el cabrón va y me la clava en el pie. ¡¡¡Con lo bien que hubiera estado yo esquivando mecheros en un campo de fútbol!!!"

Aquí tenéis las fotos de la secuencia.

(Visto en Globo, en Infobae y en Tic Espor)

Escrito por por Anónimo el 25 septiembre 2006.
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