Internet no entiende de nombres sino de hombres. Por eso acaba de autoproclamar a David Hasselhoff como auténtico rey de Internet, confirma a Chuck Norris como el puto amo y eleva a Mr. T a la categoría de actor prestigioso y cantante de culto. Internet es eso. Un grano en la nalga izquierda de Angelina Jolie, una enmienda a todas las leyes, un español en la italiana Formentera. Cosas que nadie diría que existen y que por eso están ahí.

- ¿Y eso como afecta al fútbol? - me preguntaréis.
- Pues con las mismas reglas.- os responderé-. Tú puedes buscar en Google la página oficial de Eto'o o Beckham y morir en el intento. No existen. No interesan. Los Dioses no tienen pasaportes para acceder al infierno.
- Ya captamos. El grande se hace pequeño y el pequeño grande.
- Exacto. Así, si buscas por ejemplo la web de Julio César (aquel defensa brasileño del Madrid de Iván Campo con cabeza pequeña y cuerpo largo) te encontrarás que aquello es una orgía de respuestas y escritos. La gente entra a su web cada día, le pregunta, le habla, le aclama y llora porque deja los Tigres de México para irse a Grecia. Y el talentoso defensa les reponde. Con mucho cariño, con mucha dedicación, con mucha paciencia. Eso es Internet. El lugar donde todos los sueños se pueden convertir en realidad.

Escrito por por Anónimo el 28 julio 2006.
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