Lo malo de actuar en caliente es que acostumbras a equivocarte. Ayer todos nos equivocamos trempando tan rápido y por eso debemos rectificar. El hecho que España jugara tan bien no nos tendría que haber llevado a la euforia sino a la indiferencia.

Desde la euforia no hemos pasado jamás de cuartos. Desde la indiferencia hemos logrado nuestro mejor arranque del Mundial de toda la historia. ¿Entonces porque cambiamos de tren? ¿No se trataba aquí de ser resultadista? Pues sigamos entonces en el tren del escepticismo, vayamos de vagón en vagón criticando a Albelda, Raúl, Marchena y Salgado. Sigamos lamentándonos de las pifias de nuestros delanteros y quejémonos de Luis y sus decisiones.¡¡ Que reine el pesimismo que este ha de ser nuestro Mundial!!

Escrito por por Anónimo el 15 junio 2006.
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